Institucionalizarse para recaudar a todos los productores.
Han pasado más cinco años del conflicto que originó la 125. En este tiempo, el sector liderado por la Comisión de Enlace nunca ha presentado formalmente al Congreso un proyecto consensuado por las cuatro entidades. Desde su creación hemos tenido más reclamos en asambleas que trabajo efectivo para elevar propuestas concretas para el corto, mediano y largo plazo. Criticar al poder legislativo es errar, completamente, el eje.
Autor: ARTURO NAVARRO - 29/08/2013
Debemos imaginar un sistema más ágil y efectivo que defienda real y efectivamente los intereses del sector. Llevar a la práctica un sistema como el que viene desarrollando Brasil desde 1964, cuando planificó el rol de la producción agropecuaria y agroindustria y creó por ley la Confederación Nacional de Entidades Agropecuarias (CNA). El objetivo, que se cumplió, era trabajar en una acción institucionalizada pública-privada permanente en las defensas de las propuestas, sanción de las mismas y control de las gestión de las políticas públicas. Hoy en día, sus dirigentes tienen un gran protagonismo en el trabajo parlamentario y en la ejecución y seguimientos de la políticas públicas, a nivel nacional e internacional, mostrando a los productores muchos más unidos que al principio del sistema, con resultados concretos después de 48 años.
La propuesta es crear una entidad similar a la CNA de Brasil. Esta nueva entidad debe estar integrada por todas las entidades nacionales formada por productores (la Comisión de Enlace, más AACREA y AAPRESID) en una Fundación o Centro de Estudios Estratégicos. Esta entidad recibiría el aporte de todos los productores, por un sistema de recaudación obligatoria establecido por ley, como mínimo de un 1%. Pero es fundamental la inclusión de las seis entidades: no se puede pretender recaudar a todos los productores, si muchos de ellos no se sienten representados.
La Fundación o Centro de Estudios Estratégicos, por medio de un Consejo Directivo, sería la responsable de distribuir los fondos según sean los objetivos y los porcentajes fijados previamente por el estatuto de formación. Entre los cinco objetivos principales debemos mencionar los siguientes:
1- Proponer, elaborar, concretar y hacer un seguimiento de todas las políticas de estado que tienen directa influencia para la producción, transformación y exportaciones del sector agropecuario y agroindustrial.
2- Ejecutar en forma permanente el trabajo de lobby profesionalizado interno y externo, a nivel público y privado, a fin de mejorar la competitividad del sector.
3- Proponer y trabajar en todas las modificaciones necesarias para mejorar la educación, la investigación y formación laboral, inclusive en diseño de carreras corta y de oficios.
4- Diagramar y ejecutar en forma permanente la comunicación y marketing que sea necesario para ir cambiando la imagen pública del sector, tanto agropecuario como agroindustrial.
5- Distribuir equitativamente el aporte dispuesto por ley para la acción gremial en las entidades nacionales y en los trabajos específicos de apoyo a cada uno de sus asociados.
Este sistema permitirá concretar propuestas por mayoría, terminando con los descreídos, que creen que es imposible trabajar unidos sin perder la propia identidad.
Publicacion especial para Carta Politica.