Por la sequía y el “dólar soja”, agroexportadores anticipan que crecerá la importación.

Gustavo Idígoras, titular de CIARA-CEC, adelantó a Infocampo cuál es el plan de contingencia que están pensando los empresarios agroindustriales. Afirmó que no son tan "atípicas" las compras que se están haciendo de mercadería originada en Brasil.

Autor: Por Ezequiel Morales en Infoacampo - 16/01/2023


Si bien el objetivo recaudador de parte del Gobierno para hacerse de dólares fue cumplido en gran medida gracias a las dos ediciones del “dólar soja”, en septiembre y diciembre de 2022, las compensaciones anunciadas por los efectos colaterales fueron sucediendo en cadena: las economías regionales, la lechería y recientemente la producción porcina y la avícola recibieron subsidios para su desarrollo, y así poder paliar suba de costos y afrontar la cruel sequía.

Ahora, desde la propia industria de la soja levantaron la voz de alarma.

En diálogo con Infocampo Gustavo Idígoras, presidente de la Cámara de Industrias Aceiteras de la República Argentina y el Centro Exportador de Cereales (CIARA-CEC) expresó que “el dólar soja de diciembre provocó una compra mayor de la prevista”.

“Pero también generó que no quede más stock comercial para comprar hasta la próxima campaña en mayo, o mediados de abril”, expuso.

“Por lo tanto las existencias actuales de soja en la mayoría de las fábricas están previstas hasta febrero”, apuntó el empresario y dirigente, habitual vocero del sector.

¿Qué harán desde CIARA-CEC? La idea es buscar mayores provisiones en el lapso que va desde febrero hasta mayo.

“Y ahí es donde entra la emisión temporaria que históricamente es Paraguay y gran parte del sur de Brasil, más algo de Bolivia. Eso es lo que se está viendo ahora”, indicó.

Idígoras aclaró que las versiones que llegaron por estas horas de Brasil, que daban cuenta de “exportaciones atípicas” hacia Argentina en realidad eran “contratos típicos”.

Las mismas señalaban que ahora las plantas de procesamiento de nuestro país saldrán a buscar al exterior entre 200.000 y 300.000 toneladas de poroto para el crushing.

Idígoras habló de “una práctica habitual”. Pero que se incrementará.

Cabe recordar que la capacidad de procesamiento de soja de las fábricas ubicadas en el Gran Rosario llega a unas 70 millones de toneladas, cifra que ya supera el promedio de cosecha de los últimos años. Y es casi el doble de lo que se espera de producción para esta campaña, ya que las primeras estimaciones hablan de entre 37 y 41 milones de toneladas. Por ende, las empresas no tienen otra alternativa que recurrir a comprar mercadería en los países limítrofes.

“Lo que pasa es que estos son típicos contratos que se hacen y ahora tomaron estado público, y puede ser que este año traigamos más de Brasil porque este año ellos tendrán una super cosecha y nosotros una de las más pobres de la historia”, resumió.

“Estas compras son habituales, y por eso está el régimen de emisión temporaria: cuando en Argentina el stock comercial baja mucho y el productor decide no vender, las fábricas para suplir sus compromisos de exportación empiezan a tomar soja de la región Mercosur, particularmente de Paraguay que es nuestro gran cliente y proveedor”, detalló.

Una particularidad de este año: “Teniendo en cuenta la “supercosecha” de Brasil se extienden las compras al sur de ese país, que por una cuestión logística terminan también compitiendo en precio y este año se sentirá más eso debido a la fuerte sequía en Argentina”.

¿CUÁNTA SOJA QUEDÓ DE LA CAMPAÑA 2021/22?

La necesidad de dólares de parte del Gobierno fue el principal motor para el lanzamiento de las dos ediciones que se conocieron del “dólar soja”. Al hacer foco sobre el último de diciembre, Idígoras a su vez puso la lupa sobre una pregunta para la cual pueden existir varias respuestas: ¿Cuánta soja había al inicio de esta campaña?

El analista de mercados agropecuarios Sebastián Salvaro, director de la consultora AZ Group, aportó su mirada.

“Lo que hay que cotejar es la oferta total de la campaña 2021/22 que fue de 54,8 millones de toneladas (Mtn), con el dato de “Compromiso de entrega”, que fue de 35,4 Mtn. Ese diferencial es el que en teoría habría en la cadena comercial”, explicó.

Pero se preguntó: “¿Está eso? ¿Hay menos, hay algún dato sobreestimado? Lo que hay que ver son esas variables, porque en lo que marcan esos cuadros es que aún habría soja como para comercializar”.

“Por eso la discusión pasa por saber fehacientemente con cuánto stock entraste a la campaña, porque ese 3,8 Mtn de soja disponible marca una película muy diferente a si en realidad es 3,4 Mtn, o más, como creían muchos. Y yo creo que ahí anida la especulación que hizo el Ministerio de Economía”, cerró Salvaro.